Santa Faustina y la Eucaristía

DSC_9244

El momento más solemne de mi vida es cuando recibo la Santa Comunión. Anhelo cada Santa Comunión y agradezco a la Santísima Trinidad por cada Santa Comunión. Si los ángeles pudieran envidiar, nos envidiarían dos cosas: primero, la Santa Comunión y segundo, el sufrimiento
(Diario 1804)

 

He visto con qué renuencia ha ido Jesús a algunas almas en la Santa Comunión. Y me ha repetido estas palabras: Voy a algunos corazones como a otra Pasión
(Diario 1598)

 

Jesús, en mi vida hay un secreto más, el más profundo, pero también el más querido para mí, lo eres Tú Mismo bajo la especie del pan cuando vienes a mi corazón. Aquí está todo el secreto de mi santidad. Aquí mi corazón unido al tuyo se hace uno, aquí ya no hay ningún secreto, porque todo lo Tuyo es mío, y lo mío es Tuyo. He aquí la omnipotencia y el milagro de Tu misericordia
(Diario 1489)

 

Deja un comentario